Grandes mitos de la psicoterapia

Alrededor del trabajo del psicólogo hay un gran número de mitos y aún más sobre lo que se hace en un proceso de psicoterapia. Probablemente la presencia de estos mitos en la mente de una persona en ocasiones consiguen que desista de acudir a terapia pese a creer que ir al psicólogo puede hacerles bien. Aquí repasamos algunos de estos mitos:

extraída de www.amiralodhi.com
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  1. Sólo pagas por que te escuchen.

Por supuesto que el psicólogo necesita escuchar lo que tienes que decir, pero sólo con eso no es suficiente para que aparezca una mejora. En primer lugar, el psicólogo es un experto en escuchar. Aunque en el mito número 3 veremos que en el proceso terapéutico no sólo se habla, es bueno considerar lo que el psicólogo hace cuando te escucha. Parte del trabajo de un psicólogo es saber cómo escuchar y llevar a la persona que allí acude a sentirse escuchada de una forma correcta para así poder realizar lo mejor posible el proceso de terapia. El psicólogo en gran parte escucha, pero ha aprendido a escuchar de una forma que poca gente hace, ni siquiera él mismo cuando no está trabajando.

Es un factor muy importante que sepa escuchar y además que lo que tengas que contar se relacione específicamente con lo que puede causar tus problemas. Aún así, hace muchas más cosas, te propone actividades o te hace reflexionar sobre la forma en que te concibes.

  1. La terapia es sólo para gente en crisis.

Es cierto que la mayoría de personas que acuden al psicólogo pueden identificar un detonante claro que la ha llevado hasta allí. Sin embargo, la psicoterapia no sólo trata de gestionar ese momento de crisis sino que también incluye aprendizajes nuevos para gestionar de otro modo las respuestas que se dan a situaciones que puedan resultar complicadas, un mejor conocimiento de nuestro mundo emocional y de la forma en la que pensamos. Lo que se trata finalmente yendo al psicólogo es mucho más amplio que la gestión del momento de crisis.

  1. En el psicólogo sólo hay que hablar.

Esta creencia suele estar muy extendida, y es cierto que la principal herramienta de trabajo de los psicólogos es el habla, lo que se hace a través de ello son muchas más cosas. Una gran parte del trabajo realizado en psicoterapia tiene que ver con aprender otras formas de actuar y de pensar sobre uno mismo. El cambio más potente llega a través de la acción que la persona que acude al psicólogo acaba haciendo tras las variaciones producidas en un principio por, ciertamente, el hablar.

  1. Si vas a terapia es porque hay algo malo en ti.

Las personas que comienzan un proceso de psicoterapia muchas veces piensan esto de sí mismos debido al gran malestar por el que están pasando. Sin embargo, nada más lejos de la realidad, las personas que piden ayuda a un psicólogo simplemente tienen ciertos retos que surgen en sus vidas y aspiran a afrontarlos con un propósito de mejora en lugar de a través de repetir los hábitos que les han resultado dañinos en otras ocasiones.

  1. El psicólogo te va a arreglar.

Este mito está casi tan extendido como los demás, aunque afortunadamente suele ser más fácil de desmentir, porque generalmente se plantea esto directamente al psicólogo con el que estamos tratando. El origen de esto probablemente se encuentra en el modelo de salud y enfermedad en el que el profesional le dice a la persona afectada lo que tiene que hacer para dejar de estar enfermo. Sin embargo, en la psicoterapia el proceso es algo diferente. El psicólogo proporcionará su perspectiva, sugerencias y herramientas, pero posteriormente será la persona que acude a terapia la que realiza las acciones que le llevan a los cambios hacia su bienestar.

Al final, un proceso terapéutico es un trabajo conjunto entre el psicólogo y el paciente y de los dos, el que siempre tendrá más conocimientos sobre las peculiaridades del problema a tratar será la persona que lo sufre.

Hemos querido desmentir algunos de los mitos respecto a ir al psicólogo puesto que los que hemos mencionado aquí pueden ser especialmente dañinos, tanto para las personas que están en este tipo de proceso como a aquellas que necesitan y quieren comenzarlo.

 

Fuente: Psychcentral.com

Escrito por Lara Pacheco Cuevas

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